Salud

Desde la aparición del modelo de salud biopsicosocial la salud ya no es la simple ausencia de enfermedad, ésta se define, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) como el estado de bienestar tanto físico, mental y social. Desde este punto de vista, se incide en la salud positiva y contempla la enfermedad, sobre todo aquellas enfermedades crónicas, como el resultado de la interacción de determinadas condiciones biológicas psicológicas y sociales. 

La psicología de la salud, es una rama dentro de la psicología que se centra en el análisis de los comportamientos y los estilos de vida individuales que afectan a la salud física de las personas. Las enfermedades crónicas pueden tener muchas causas, sin embargo, es conocida el hecho de que el comportamiento y el estilo de vida de la persona esta fuertemente implicado en el desarrollo de las mismas. 

Algunas de las enfermedades crónicas se abordan desde la psicología de la salud son: cáncer, diabetes, problemas caridovasculares, fibromialgia, artritis reumatoide, obesidad, problemas gastrointestinales, etc. 

En este sentido, la psicología juega un papel fundamental en el cuidado de la salud de las personas. Desde este punto de vista, la psicología de la salud se centra en el trabajo con técnicas y estrategias que ayudan a las personas a modificar comportamientos insaludables implicados en la aparición de enfermedades.

Desde esta perspectiva, la intervención psicológica esta indicada cuando un problema de salud se ha desencadenado a raíz de un problema emocional, o si es la propia enfermedad la que causa un malestar a nivel emocional, y este resulta intenso y duradero. 

Desde la psicología de la salud, intervenimos para conseguir otros objetivos como afrontar eficazmente los problemas, aliviar el dolor en personas con enfermedades crónicas, reducir la ansiedad y el estrés, mejorar del estado de ánimo, aumentar el grado de cumplimiento de las prescripciones médicas y ayudar a las personas y familiares a convivir con situaciones de enfermedad, etc.